Hoy la comunidad Jenkko no cuenta con miembros fijos, ya que desde hace décadas la mayoría de ellos han desaparecido; luego de la segunda guerra mundial los pocos sobrevivientes quedaron separados, perdiendo la unión que los caracterizaba. Hace algunos años atrás dimos con la información de que la mayoría de estos miembros habían fallecido, lo cual nos abrió aún más los ojos y así reunir el coraje suficiente para comenzar a pensar en la posibilidad de poder transmitir lo que, en nuestro caso, consideramos que es una de las maneras más puras de encontrar la paz interior y la hermandad con nuestra madre, nuestra tierra.
Confío plenamente en las enseñanzas que mi abuelo nos ha dejado, ya que él mismo fue uno de los sobrevivientes que en 2002 terminó su ciclo en esta vida. Consideramos que podemos honrar de la mejor manera posible no solo a él, si no a todos los miembros que una vez conformaron una comunidad que creía en la unión, la prosperidad, la hermandad y en la paz con nosotros mismos y lo que nos rodea.
Te damos la bienvenida a nuestra comunidad! Y esperamos que disfrutes de conocer nuestra cultura, que si bien no fue y no es una civilización, puede llegar a ser lo que busca tu alma y tu corazón.
No somos una Iglesia, con todo respeto, Jenkko no es solo una religión o uniones de creencias diferentes y desconocidas, Jenkko es un estilo de vida.